La carrera para poner un vehículo de auto-conducción en la carretera está en pleno apogeo con BMW, Tesla, Apple y Google, todos compitiendo para ser el primero. Sin embargo, en última instancia pueden ser suecos los que están a la cabeza.
Un reportaje que publica la periodista Benjamin Zhang, del sitio businessinsider.com, pone de manifiesto que la carrera por la autonomía en la conducción de vehículos es prácticamente una realidad.
Zhang destaca que la semana pasada, Volvo anunció que pondrá 100 vehículos de conducción automática en manos de los consumidores a partir de 2017.
El programa se denomina “Drive Me: autos de auto-conducción para la movilidad sostenible”, una iniciativa conjunta entre Volvo Cars Group, la Administración de Transporte de Suecia, la Agencia Sueca de Transporte, el Parque de las Ciencias Lindholmen y la ciudad de Gotemburgo. El Gobierno sueco está apoyando el proyecto.
Esta prueba piloto inicial dejará ver la tecnología de autoconducción fuera del laboratorio en las calles de Suecia, y será con conductores reales, lo que también es un gran reto para la empresa.
“Estamos entrando en un territorio desconocido en el campo de la conducción autónoma”, dijo Peter Mertens, vicepresidente de Volvo, quien destacó que dar el paso es emocionante para un público piloto, con la ambición de permitir a la gente común sentarse detrás del volante en el tráfico normal como nunca se había hecho.
Ubicación
El programa piloto se llevará a cabo en las calles de la ciudad natal de Volvo en Gotemburgo, Suecia. La empresa informó que la ciudad ha dado su aprobación para que los clientes seleccionados conduzcan por la vía pública con un programa de conducción autónoma.
Según Volvo, el sistema de piloto automático es lo suficientemente confiable, por lo que será capaz de hacerse cargo de todos los aspectos de la experiencia de conducción.
El fabricante de automóviles afirma que su sistema será capaz de manejar todo, desde la conducción diaria de tráfico de embotellamiento a situaciones de emergencia.
Para lograr esto, el fabricante de automóviles sueco dependerá de una red de sensores, sistemas de posicionamiento basados en la nube y de frenado inteligente y tecnología de dirección. Los sensores incluyen siete radares, 12 sensores de ultrasonidos, cinco cámaras y un escáner láser.
Según Volvo, todos ellos trabajan juntos para permitir que el conductor haga casi cualquier cosa excepto conducir el coche. Si alguno de los sistemas en el coche fallan, Volvo apuntó que hay sistemas de copia de seguridad redundantes listo para tomar el relevo.
El fabricante sueco de vehículos tiene tanta confianza en su sistema de piloto automático que sus ingenieros creen que su tecnología de auto-conducción es mejor que los seres humanos cuando se enfrentan a una situación de emergencia.
INTELIGENCIA
Las cualidades del nuevo vehículo, aún en fase de prueba, lo ubican en un lugar especial en su inteligencia.
“En una emergencia real, sin embargo, el coche reacciona más rápido que la mayoría de los seres humanos”, dijo Erik Coelingh.
Señala que en caso de que el piloto automático deba desactivarse por el clima o mal funcionamiento, el coche le pedirá al conductor que tome el relevo, pero si el vehículo nota que el conductor no toma el control de manera oportuna o está incapacitado, habrá una parada.
El reto, según el reportaje, es lograr saber cuándo habrá la autorización del mercado para ampliar el programa de conducción automática de Volvo, pues aunque la empresa está lista, falta por definir algunos aspectos relacionados con la calidad de las vías.