Por Leonel Mateo Hernández
Mientras los datos más recientes del comercio exterior dominicano reflejan indicios de estancamiento de nuestras exportaciones globales, el despacho de mercancías hacia la Unión Europea exhibió un desempeño dinámico nunca antes visto en la relación con nuestro segundo socio comercial.
La información de la agencia europea Eurostat indica que, de enero a agosto de este año, las exportaciones a la UE ascendieron a €706 millones, lo que supone un incremento de 19%, respecto al mismo período de 2018. Este rendimiento se convierte en el mayor volumen registrado para este período con ese bloque regional.
La expansión de nuestras exportaciones fue superior al crecimiento de apenas 1% de las importaciones procedentes de la UE, las cuales acumularon €1,304 millones, afectadas por una reducción en las compras de maquinaria y equipos para la generación de energía, renglón de gran peso en la balanza comercial.
La incidencia de ambas variables redujo el déficit comercial en un 15% y contribuyó a una tasa de cobertura promedio de 54%, aumentando en ocho puntos nuestra capacidad de pagar las importaciones con las exportaciones.
Sectores de crecimiento
De acuerdo a los datos de Eurostat, el banano mantuvo su posición de liderazgo con exportaciones valoradas en €168 millones, para un crecimiento de 22%. El aguacate registró un avance de 86% con exportaciones que ascendieron a €36 millones; mientras que el cacao en grano experimentó una reducción de 7%, colocándose en € 64 millones.
Las exportaciones de tabaco acumularon €42 millones, para un aumento de 21% y las de ron subieron un 3%, totalizando €48 millones.
Entre los productos elaborados en zonas francas, los dispositivos médicos y los aparatos de electro-diagnóstica lograron un desempeño positivo de 21% y 15%, respectivamente, acumulando €89 millones entre los dos. Los productos farmacéuticos sumaron €63 millones, para un crecimiento de 86%, y los disyuntores se situaron en €11 millones, con un ascenso de 23%.
En contraste, las exportaciones de ferroníquel totalizaron €31 millones, para un descenso de 32% en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Distribución geográfica
El envío de bienes a nuestros principales socios europeos creció de manera significativa.
Con Holanda, donde se ubica el mayor puerto europeo, las exportaciones tuvieron un aumento de 34%, gracias a mayores exportaciones de frutas y vegetales frescos.
Igualmente, un aumento en las ventas de cacao contribuyó a un avance de 16% con Bélgica, y mayores exportaciones de productos farmacéuticos al Reino Unido significaron un crecimiento de 14% en el intercambio bilateral.
En cambio, nuestras exportaciones hacia Italia decrecieron en 36% debido a menores exportaciones de cacao y a España en 11%, por una reducción en las ventas de manufacturas de metal.
Precaución ante incertidumbre económica
A pesar de las buenas noticias, el sector exportador debe mostrarse vigilante.
En verano las exportaciones hacia la UE empezaron a mostrar una tendencia a la baja, con señales de estancamiento en agosto. Igual ocurrió con las importaciones europeas en el país, por lo que dos factores deben ser observados con cuidado.
Por un lado, diversos expertos económicos se han hecho eco del impacto del panorama político local y la desaceleración económica mundial en el aparato productivo nacional y nuestra capacidad exportadora.
Por el otro, la inminente implementación de nuevas medidas que regirán el acceso al mercado europeo podría tener efectos negativos en nuestras exportaciones agrícolas. Numerosos países, entre los que se encuentra la República Dominicana, realizan un lobby diplomático ante Bruselas y la OMC para evitar mayores consecuencias.
El momento es el adecuado para consolidar nuestra posición exportadora con la Unión Europea, diversificar nuestra oferta y acceder a aquellos mercados donde los consumidores exigen productos de calidad, apegados a la sostenibilidad, y donde todavía tenemos grandes oportunidades de crecimiento.