El índice de precios de gasto de consumo personal de Estados Unidos, la estadística escogida por la Reserva Federal (Fed) para monitorizar la inflación del país norteamericano, creció un 1.5% en mayo, lo que equivale a un descenso de una décima con respecto a abril, según los datos publicados este viernes por la Oficina de Análisis Económico del Gobierno.
El índice subyacente, que excluye de su cálculo los precios de los alimentos y la energía por su mayor volatilidad, cerró el quinto mes de 2019 con un incremento del 1.6%, la misma cifra que la observada durante abril.
De esta forma, el índice general se ha mantenido por debajo del objetivo de la Fed del 2% por séptimo mes consecutivo.
En tasa mensual la variable general del índice de gasto de consumo personal experimentó un avance del 0.2%, una décima menos que en abril, mientras que la variable subyacente se mantuvo sin cambios en el 0.2%.
El bajo nivel de inflación en comparación con los objetivos de la Fed llevó a que, durante la última reunión de política monetaria del instituto emisor de Estados Unidos, el presidente del Banco de la Reserva Federal de San Luis, James Bullard, votara a favor de rebajar los tipos de interés en 25 puntos básicos.
Pese a que la decisión final fue mantener el precio del dinero en un rango objetivo de entre el 2.25% y el 2.50%, la posición de Bullard rompió el consenso entre los miembros de la Fed en este tipo de votaciones por primera vez desde diciembre de 2017.