El índice de precios de consumo (IPC) en España cerró 2018 en el 1.2% interanual, tras moderarse en más de un punto en los dos últimos meses del año.
El Instituto Nacional de Estadística (INE) confirmó este martes el dato de la inflación de diciembre pasado, que es cinco décimas inferior al de noviembre como consecuencia de la bajada de los precios de los carburantes, sobre todo del gasóleo y la gasolina.
Aunque la inflación interanual prácticamente se redujo a la mitad en los dos últimos meses del año (desde el 2.3% de octubre), el cierre de 2018 en el 1.2% supone una décima más respecto al cierre de 2017 (1.1%).
El IPC español comenzó el año pasado en el 0.6%, y tras fluctuaciones mensuales que llegaron al 2.3% en junio, septiembre y octubre, se moderó en los dos últimos meses del año, hasta el 1.2% de diciembre.
En la recta final del año, y gracias a la caída de la cotización del crudo en los mercados internacionales, fue cuando la inflación perdió gran parte del terreno ganado durante el ejercicio.
El IPC Armonizado, que mide la evolución de los precios con el mismo método en todos los países de la zona euro, coincide en el 1.2%, tras un descenso también de cinco décimas en diciembre de 2018 respecto a noviembre.