El turismo aumentó el año pasado cuatro décimas su peso en la economía española respecto a 2016, hasta el 11.7% del producto interior bruto (PIB), mientras que el empleo bajó una décima en el sector, hasta el 12.8% del total de ocupados.
Desde 2010, la aportación del turismo a la economía española creció 1,5 puntos porcentuales, al pasar del 10.2% al 11.7%.
La evolución en términos reales del sector fue mejor que la del conjunto de la economía, según la Cuenta Satélite del Turismo (CSTE) difundida hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
La ocupación laboral en las ramas económicas características del turismo alcanzó los 2.6 millones de trabajadores el ejercicio pasado.
De esta manera, el empleo vinculado al sector turístico creció 1.2 puntos porcentuales desde 2010, del 11.6% al 12.8%.
La demanda final turística, por la que se mide el peso del PIB asociado al sector, alcanzó 137.020 millones de euros en 2017, lo que supone un aumento del 5.6%.
El elemento principal en la demanda final turística en 2017 fue el consumo receptor (visitantes no residentes), con el 50% del total, el componente agregado que más se incrementó los últimos años.
Su peso en el PIB fue del 5.9%, lo que representa tres décimas más que en 2016, con 68.532 millones de euros. Esta cantidad, por primera vez desde 2010, es superior a la de otros componentes del turismo.