Santo Domingo.- La Asociación Nacional de Jóvenes Empresarios (ANJE) manifestó su indignación por lo que define como “uso inadecuado” de los recursos del Estado y reclamó al Gobierno mejorar la calidad del gasto público.
“La deficiente calidad del gasto público es un factor que afecta el desarrollo económico y social y la estabilidad del clima de inversión de la República Dominicana”, expresó Biviana Riveiro Disla, presidenta de la ANJE en una nota de prensa. “Nuestro país tiene múltiples necesidades para mejorar el desarrollo humano de la población, que son desatendidas por el gobierno por destinar recursos económicos a áreas que no generan bienestar ni económico ni social”, agregó.
Dijo que esos gastos innecesarios han provocado el aumento del nivel del endeudamiento nacional, de manera injustificada.
La dirigente empresarial señaló como ejemplos la asignación este año de RD$178 millones de pesos para la compra de electrodomésticos de parte de los legisladores para el Día de las Madres; la cantidad de nóminas de instituciones públicas supernumerarias que no se corresponden con los servicios prestados.
Mencionó la nómina del Ministerio de Relaciones Exteriores, así como la deficiente asignación de recursos que hace el Estado sin respetar los principios más básicos de transparencia, calidad y eficiencia del gasto público.
La ANJE pidió la inmediata revisión y reducción de las nóminas públicas, además de que se corrijan las inconsistencias salariales en el Ministerio de Relaciones Exteriores.
“El país debe contar con una representación diplomática competente y calificada en el extranjero, que permita tener beneficios tangibles en términos comerciales y que vayan en consonancia con las características de nuestra economía”, detalló Riveiro Disla.
La ANJE aboga para que se apruebe el Reglamento de la Ley 105-13 sobre Regulación Salarial del Estado Dominicano, para que pueda entrar en vigencia y que el Gobierno responda con medidas contundentes ante los hechos que puedan hacer cuestionar la calidad y eficiencia del gasto público.
Considera necesario revertir las señales equivocadas que éstas actuaciones generan, pues no se puede exigir a la población colaborar a sustentar una estructura gubernamental ineficiente y gastos que no generan retorno social o económico.