Conatra, la organización de transportistas que lidera Antonio Marte, ha anunciado que tiene capacidad para suplir la demanda de asientos que generan los centros educativos públicos y privados.
Asegura que para ello se ha venido estructurando un sinnúmero de acciones que involucran la capacitación de recursos humanos competentes para este tipo de transporte especial, así como propuestas técnicas y estratégicas que puedan convertir este servicio en un transporte eficiente y confiable.
Se oye muy bonita y atractiva la explicación. Sin embargo, hay que tener mucho cuidado con esto. Ninguna de las organizaciones de transporte han demostrado capacidad para ofrecer un servicio seguro y de calidad. La historia está ahí.
Los estudiantes no pueden ser presas de estas organizaciones. El Estado no puede caer en ese juego. El Intrant debe actuar con mesura. Cuidado con entregarle mayor capacidad de chantaje estos grupos.