La labor de compras es de gran impacto para todas aquellas organizaciones que desean mantener una estrategia de negocio basada en un consumo responsable y contribuir con el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS).
La compra sostenible implica tomar decisiones de adquisición que satisfagan las necesidades de una organización que les beneficie, sin descuidar la sociedad y el impacto en el medio ambiente, lo que implica asegurar que los proveedores se comporten éticamente, que los productos y servicios comprados sean sostenibles, tomando en cuenta los asuntos sociales, económicos y ambientales que estos pueden impactar.
El consumo responsable supone no sólo una buena actitud de la empresa por integrar nuevas prácticas en sus procesos diarios, sino también la posibilidad de acceder a productos novedosos, que impacten positivamente desde el punto de vista ecológico y social.
La compra sostenible toma en cuenta criterios generales basados en la sostenibilidad a la hora de realizar una compra verde, tales como:
- Reducir el volumen de las compras, tomando en cuenta si lo que vamos a comprar va a satisfacer realmente la demanda real.
- Buscar alternativas que minimicen la explotación de los recursos naturales, utilizando productos de segunda mano, reutilizar, realizando intercambios, o reparando.
- Asegurar la calidad de los productos que se compran de cara a adquirir bienes más saludables y duraderos.
- Obtener información acerca de las repercusiones sociales y medioambientales de los bienes y servicios. Utilizando productos y servicios de comercio justo y ético.
- Valorar que las empresas fabricantes y distribuidoras del producto sean ambientalmente responsables y procedan de la economía social y alternativa.
- Elegir productos que su funcionamiento y mantenimiento requiera el mínimo consumo de recursos naturales como agua, energía… y la mínima generación de residuos y emisiones.
Las empresas pueden aplicar la norma ISO 20400 integrando medidas eficaces en sus métodos de contratación y manteniendo una buena política de compras sostenibles, que tiene como objetivo la adopción de diversos criterios de sostenibilidad social y ambiental a lo largo del proceso de adquisición de bienes y contratación dentro de cualquier empresa, buscando la eficiencia en la utilización y reciclaje de los recursos utilizados por la empresa, obteniendo como resultado una disminución del gasto invertido en la adquisición de bienes y contratación de servicios por parte de ésta.
La compra sostenible no toma en consideración tan sólo precios, plazos o condiciones, tiene en cuenta el impacto que puede generar la adquisición de un bien o un servicio en el medio ambiente o la sociedad del bien o el servicio comprado.
Hoy en día la adopción de criterios de sostenibilidad social y ambiental en las actividades de una empresa que mantiene una política de compras tiene una influencia directa en cómo es visualizada por los consumidores, generando a su vez menos costes de producción, un producto más competitivo, y una mejor imagen corporativa.