Hasta el momento los productores de banano han vendido al Ministerio de Agricultura más de 62,834 quintales de banano, por un valor de alrededor de RD$11 millones, como parte de la salida que le ofreció el Estado para encontrar mercado a una cosecha que tuvo dificultades para exportarse, sobre todo a países de Europa.
Julio César Estévez, director ejecutivo de la Asociación Dominicana de Productores de Banano (Adobanano), explica que, pese a la situación que se da en estos momentos, los bananeros tienen una “perspectiva positiva”, ya que el precio de la fruta en el mercado local aumentó y oscila entre 150 a 200 pesos el quintal.
“Antes del Ministerio de Agricultura iniciar la compra, oscilaba entre 60 y 80 pesos el quintal, y sobre el mercado internacional, estamos recibiendo visitas de los compradores para durante el mes de noviembre realizar los contratos para el 2020”, dice.
Pero, más allá del ámbito nacional, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por su sigla en inglés), advirtió, en diciembre pasado, sobre dificultades en el mercado del banano que serían atizadas por los efectos del clima en la región del Caribe.
“Se estima que las exportaciones del Caribe descenderán a 177,000 toneladas en 2017 –un descenso del 54 por ciento en comparación con 2016– debido a las graves interrupciones de la producción relacionadas con el clima en República Dominicana, que representa aproximadamente el 98 por ciento de las exportaciones de la región”.
Al analizar la situación del mercado del banano, la FAO recuerda, en un documento difundido por la FAO desde Roma este 2018, que “la producción bananera en República Dominicana resultó particularmente afectada por los fuertes vientos e inundaciones provocados por el huracán Irma, que azotó el Caribe en septiembre de 2017 y, según los informes, destruyó alrededor del 50 por ciento de la cosecha de banano del país”.
Añade que “una situación similar se había observado en 2015, cuando las tormentas tropicales destruyeron alrededor del 40 por ciento de los cultivos bananeros del país”, añade.
Señala que “la creciente frecuencia y magnitud de los fenómenos meteorológicos adversos en la región son motivo de gran preocupación, en particular para los pequeños exportadores como Dominica, cuya posición competitiva en el comercio del banano se ha visto socavada por su incapacidad para proteger los cultivos contra los desastres naturales”.
El Gobierno prometió destinar, a través del Ministerio de Agricultura, más de RD$100 millones a la compra del excedente de banano en la producción actual. En ese sentido, se comprometió a adquirir unas 16.4 millones de unidades del rubro, con el fin de distribuirlas a los hospitales, los distintos organismos del Ministerio de Defensa y otras entidades gubernamentales. La entidad, que encabeza Osmar Benítez, todavía no ofrece un informe detallado sobre el desarrollo del programa de compra.
A nivel global
La FAO preveía, al tratar el tema a nivel global, que tras dos años consecutivos de crecimiento sostenido, las exportaciones mundiales de banano, excluido el plátano, alcanzarían los 18.1 millones de toneladas en 2017. “Esto representaría una recuperación importante con respecto a la caída de las exportaciones en 2015 ocasionada por el clima, cuando los volúmenes se redujeron a 16.7 millones de toneladas”.
Indica que las exportaciones de la fruta se beneficiaban, en el contexto de una fuerte demanda en los principales mercados, del aumento de la oferta por parte de algunas de las principales regiones exportadoras, sobre todo de América Latina y el Caribe.
“Una serie de tormentas tropicales que asolaron el Caribe en septiembre de 2017 causaron graves interrupciones del suministro y el transporte en el cuarto trimestre del año, lo que provocó importantes pérdidas de cultivos y una disminución de los envíos de varios países del Caribe.
Resalta que las exportaciones de América Latina y el Caribe aumentarán un 4% en 2017 gracias a un crecimiento estimado del 10% en Ecuador y Colombia, dos de los cuatro principales exportadores de la región.
Los dos países se han beneficiado de las reducciones arancelarias previstas en el marco de los acuerdos entre la Unión Europea y los países andinos en 2017, tras la disminución del tipo arancelario de 127 euros a 97 euros por tonelada para el Ecuador y de 103 euros a 96 euros por tonelada para Colombia el 1 de enero de 2017, destaca la FAO en su último informe sobre el mercado del banano.
Venta
“La primera ronda de negociaciones, de consultas, intercambios para la venta de banano para fijar volumen y precio empieza quizá a final de noviembre”, asegura el presidente de la Adobanano, Salvador Estévez.
“No hemos dejado de exportar, lo que pasa es que el que se sembró, después de las inundaciones de Irma y María, encontró el mercado en su peor momento”, dice.
Entiende que los productores requieren apoyo del Gobierno para la mejoría de las carreteras rurales y los caminos de las fincas, así como de los puertos. Entiende que los bananeros podrán restablecer la exportación del banano.
“Ya tenemos más de 30 años en el sector bananero exportando, haciendo una negociación directa desde la asociación con los exportadores y los supermercados”.