El crecimiento que han registrado las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) representa un apoyo significativo en el desarrollo y dinamización de la economía dominicana.
Según el boletín trimestral de la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE), las Mipymes aportan un 38.6% al producto interno bruto (PIB), destacándose en la actividad económica a nivel regional, ya que representan el 99% de las empresas, convirtiéndose en uno de los principales sectores de la economía nacional que aporta más fuentes de empleo, con más del 67% de los puestos de trabajo de República Dominicana.
En 2013, el país contaba con más de 1.3 millones de unidades productivas de pequeña escala, ocupando las micro, pequeñas y medianas empresas la mayor proporción, según lo establece la Encuesta Nacional de Hogares de Proporción Múltiples (Enhogar). De acuerdo con los datos, este segmento de la economía es una parte fundamental del crecimiento económico del país.
Las Mipymes, que en el país se definen como aquella unidad consagrada a la explotación económica que realiza cualquier persona natural/física o jurídica en distintas áreas como la agropecuaria, la industria, el comercio o de servicios en zonas rurales o urbanas, han logrado posicionarse entre los principales sectores que más aportan a la economía del país. El informe destaca que el 54.5% de estas empresas posee su local fijo, mientras que el 28.63% cuenta con su establecimiento móvil, en tanto que las que pertenecen al sector agropecuario representan el 16.26%, y minas y pesca con un 0.58%.
Local fijo
El boletín trimestral de la ONE establece que las mujeres se destacan por tener el mayor porcentaje de las actividades de Mipymes con local fijo, con un 56%.
De su lado, los hombres ocupan un mayor porcentaje en las demás unidades productivas, con el 77.9% de las unidades móviles, el 90% en la agropecuaria y el 100% de participación en minas y pesca.
A pesar del ascenso económico que han obtenido las Mipymes, estas siguen teniendo grandes retos en materia de financiamiento por parte de los sectores público y privado, además de la poca asesoría en materia fiscal, la carencia de una contabilidad organizada y el desconocimiento de las leyes y normativas por parte de los emprendedores. “Son parte de los obstáculos que debe superar este sector para lograr mayores ventas, y obtener así un mayor crecimiento y un mejor posicionamiento en la economía nacional”, observa la investigación de la ONE