En un seminario sobre infraestructuras en Madrid organizado por el CAF-Banco de Desarrollo de América Latina, dirigentes de instituciones públicas y privadas de Latinoamérica destacaron que la lucha contra la corrupción es un reto para el desarrollo de inversiones en las asociaciones público-privadas.
A lo largo de la Conferencia, tanto responsables políticos como empresarios del sector, reconocieron que es vital un marco jurídico estable, que dé seguridad a las empresas que invierten en el sector.
“Un Estado debe hacer reglas y tener la capacidad de cumplirlas y eso atrae al mejor inversor, al innovador”, afirmó el presidente del Banco Central de Uruguay, Mario Bergara, para quien “un Estado débil atrae al inversor rentista más que al innovador”.
En este sentido, los participantes señalaron también que la lucha contra la corrupción es un reto para el desarrollo de esas inversiones.
“La corrupción, lamentablemente, ha afectado y ha paralizado en algunos lugares el proceso de crecimiento”, dijo el presidente del Directorio de la Corporación Financiera de Desarrollo (Cofide) de Perú, Pedro Grados.
Este experto defendió un crecimiento de la institucionalidad para que el flujo futuro de inversiones “sea más previsible” y consideró “fundamental” el desarrollo de un mercado de capital si se desea mirar a “largo plazo”.
Este experto defendió un crecimiento de la institucionalidad para que el flujo futuro de inversiones “sea más previsible” y consideró “fundamental” el desarrollo de un mercado de capital si se desea mirar a “largo plazo”.
Sin embargo, el presidente del Banco Nacional de Desarrollo (BNDES) de Brasil, Dyogo de Oliveira, comentó que es el momento de aislarse de los “errores del pasado” y subrayó que es el momento de “unirnos aún más” con la integración entre los países de América Latina.
“Hay que dejar un mensaje muy claro de que el camino que queremos seguir no es el del conflicto, sino el de la cooperación internacional”, defendió De Oliveira.
Dirigentes políticos y empresarios coincidieron en los beneficios de una colaboración público-privada para la construcción de infraestructuras en Latinoamérica, básicas para su desarrollo, y consideraron clave un marco legal eficiente y seguro.
En ese sentido, también señalaron algunos matices: las empresas buscan flexibilidad en las condiciones de los contratos, y los gobiernos seguridad en la ejecución de obras claves para sus países.
“Lo más importantes no es la financiación, sino el fortalecimiento de las instituciones para construir proyectos con buenas tasas de retorno y que los bancos quieran financiar”, dijo el ministro de Hacienda de Colombia, Mauricio Cárdenas, durante la Conferencia que organizó la CAF sobre infraestructuras e integración en América Latina.
Cárdenas, destacó la importancia de fortalecer las instituciones para que aprueben proyectos “con buenas tasas de retorno” y que los bancos quieran financiar.
“Hay que hacer eficiente uso del capital para conseguir inversionistas”, destacó Cárdenas.
Como ejemplo, puso la creación en su país de la Financiera de Desarrollo Nacional en la que participa CAF, destinada a financiar a largo plazo proyectos de infraestructura que favorezcan la integración, como por ejemplo una autopista entre Colombia, Venezuela y Ecuador que hace el comercio más competitivo.
La ministra de Planificación del Desarrollo de Bolivia, Mariana Prado, insistió en que las infraestructuras son un “elemento crucial” para favorecer la integración y el desarrollo de su país, donde el treinta por ciento de la inversión pública se destina a infraestructuras.
No obstante, Prado reconoció que en un futuro próximo estudian mecanismos de financiación mediante acuerdos con el sector privado.
“Priorizamos el rol del Estado en infraestructuras estratégicas, pero estamos en un proceso de apertura”, confirmó la ministra.
Cárdenas y Prado participaron en la Conferencia “Infraestructura para la integración en América Latina”, organizada por CAF-Banco de Desarrollo de América Latina.
Ambos intervinieron en el panel: “Infraestructuras para la integración y su impacto en la productividad regional”, junto con el presidente de la gestora de concesiones de autopistas y ferrocarriles Globalvia, Juan Béjar.
Béjar, como representante del sector privado, insistió en la importancia de establecer un margen de flexibilidad en los contratos para la construcción de infraestructuras ante las dificultades que puedan ocurrir en el proceso.
Asimismo, pidió que sean las autoridades las que solucionen posibles problemas legales derivados de expropiaciones o conflictos con comunidades locales que pudieran aparecer en proceso de construcción de una infraestructura.
Por su parte, los representantes políticos insistieron en la idea de un desarrollo inclusivo, donde haya “una interacción” y un “entendimiento con las comunidades”, como señaló el presentador del panel, Antonio Pinheiro Silva, vicepresidente de infraestructuras de CAF.
Esta es la primera conferencia anual de CAF en España y su intención es comenzar un espacio permanente de debate y discusión sobre temas relevantes para la región, comenzando con las infraestructuras.
El encuentro contó con la presencia del presidente ejecutivo de CAF-Banco de Desarrollo de América Latina, Luis Carranza.
El dirigente de CAF expresó el compromiso de esta organización con el desarrollo económico y el bienestar de los más pobres de Latinoamérica y destacó el papel que en este reto tiene el desarrollo de las infraestructuras.
“Las infraestructuras son fundamentales no solo para el crecimiento económico, sino también para mejorar los ingresos y el bienestar de los más pobres de nuestra región”, afirmó Carranza
Coincidió en este planteamiento la ministra de Planificación del Desarrollo de Bolivia, Mariana Prado, quien definió las infraestructuras como un “elemento crucial” para favorecer la integración y el desarrollo de su país.
El desarrollo de las infraestructuras no solo incluye las redes de comunicación y transportes (puertos, aeropuertos, autovías o ferrocarril), sino también otros sectores como las telecomunicaciones, el agua y el saneamiento.
Todos los participantes en la conferencia coincidieron en la importancia de las asociaciones público-privadas para desarrollar estas infraestructuras en Latinoamérica, un continente deficitario en ellas.
Como señaló Carranza, en América Latina el 5% de la población de la región no tiene electricidad, hasta 288 millones de personas que no tienen internet y 27 millones que no tienen agua y además, el continente sufre una brecha del 39% en la eficacia de la logística del transporte.
Esta situación repercute negativamente en las capas más débiles de la población y es un lastre para el desarrollo económico.
Asimismo, participaron de este diálogo el consejero ejecutivo del banco español BBVA José Manuel González-Páramo, el especialista sénior de CAF Rafael Farromeque y la directora del Ministerio de Economía y Empresa de España, Pilar Más.
González-Páramo abogó sobre la necesidad de esta región en desarrollar sus conexiones para la comunicación y defendió inversiones en banda ancha, fibra óptica y de la tecnología 5G para atender demandas sociales “importantes”.
“Es una paradoja que en Latinoamérica haya costes más altos en telecomunicaciones que en el conjunto de los países europeos”, señaló el ejecutivo.
Tema recurrente en este encuentro es la definición de los marcos legales para convertir el mercado de infraestructuras en un sector más eficiente y atractivo para los inversores.
“El gran desafío es tener un marco legal y una practica de reducción de estas leyes que sean más eficientes. Este es el gran desafío”, destacó el presidente del BNDES.
De Oliveira apuntó que en este sector no hay falta de inversores, pues, según el representante brasileño, “hay gente en todo el mundo que quiere financiar infraestructuras”.
Desde la administración española, inauguró la Conferencia la secretaria de Estado de Economía y Apoyo a la Empresa, Ana de la Cueva, quien anunció una línea de crédito de 130 millones de dólares para financiar proyectos de interés español en América Latina.
En el último panel intervino la consejera delegada de ICEX, organismo público de España dedicado a la exportación e inversiones, María Peña, donde puso de manifiesto la importancia de las empresas españolas en América Latina, el 40% de ellas en el sector de las infraestructuras, con una gran experiencia y prestigio.
El encuentro es la primera conferencia anual de CAF en España, en la que intervinieron ministros y responsables de Economía, Finanzas y Planificación de Bolivia, Brasil, Colombia, España, Paraguay, Perú y Uruguay, así como representantes españoles por parte del sector privado.
Tras este encuentro, está previsto que este martes se reúna en Madrid el directorio de la CAF, encuentro que abrirá el rey Felipe VI de España, donde se aprobarán importantes proyectos de infraestructuras para Argentina, Colombia, Brasil y Bolivia.