Las Cuentas Nacionales constituyen un sistema contable que ofrece una visión global de la economía de un país. Registra un conjunto de variables y transacciones relacionadas a la producción, el ingreso generado y la distribución de ese ingreso. Estas representan una importante herramienta analítica para la toma de decisiones, tanto para los hacedores de política económica como para los inversionistas del sector privado nacional e internacional.
El proceso de globalización en que se encuentra inmersa la economía dominicana en las últimas décadas, ha conllevado variaciones significativas en la estructura productiva nacional, por los cambios en los precios relativos, la aparición de nuevos productos y servicios, los cambios tecnológicos, mayores inversiones extranjeras en el país y un crecimiento económico sostenido.
Ante este panorama, las recomendaciones internacionales sugieren que se realice un cambio de año base con la finalidad de actualizar la estructura productiva de un país mediante la adopción de las metodologías más recientes para elaborar las Cuentas Nacionales. Estas deben ser adoptadas de manera rigurosa por todos los países para asegurar la comparabilidad internacional debido a que los organismos internacionales especialistas en la materia mantienen una supervisión permanente para su adecuada aplicación; tal es el caso de las Naciones Unidas, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), el Fondo Monetario Internacional (FMI), entre otros.
Por lo expuesto anteriormente, el Departamento de Cuentas Nacionales y Estadísticas Económicas del Banco Central de la República Dominicana (BCRD) inició en el año 2009 un proyecto de cambio de año base, amparado en el Manual del Sistema de Cuentas Nacionales de 2008 (SCN2008), seleccionando el 2007 por ser un año de recuperación y consolidación de la estabilidad macroeconómica.
Un hecho a resaltar es que la República Dominicana se encuentra entre los países con el año base de las Cuentas Nacionales más reciente, después de Chile, cuyo año de referencia es 2008. Otros países que aún no han publicado sus resultados de manera oficial pero que han actualizado su año base a 2007 son Venezuela, Perú y Panamá.
Los resultados derivados del cambio de año de referencia 2007 arrojan datos muy reveladores, enunciados a continuación:
El nivel del Producto Interno Bruto (PIB) para el nuevo año de referencia 2007 es ahora superior en 0.7% al nivel publicado con la metodología anterior del año de referencia 1991, demostrando este resultado que el PIB estaba subestimado en RD$10,060 MM. Esto contradice los señalamientos de algunos analistas económicos que cuestionaban el nivel del PIB y se daban a la tarea de afirmar una sobrevaloración del mismo sin fundamento alguno.
A pesar de la diferencia poco significativa en el nivel total del PIB del año base 2007, el análisis de este indicador por el enfoque de la producción refleja cambios estructurales importantes en la composición de las actividades económicas donde algunas ganaron ponderación, como es el caso de la construcción, minería, comercio y otras actividades de servicios, mientras que otras redujeron su aporte a la economía, tal es el caso de las principales productoras de bienes: agropecuario y manufactura.
Otro hallazgo interesante derivado de esta investigación es que la economía continua transformándose en una economía mayormente de servicios, pasando de una participación de 48.0% en el 1991 a 59.4% en el 2007. En cambio las productoras de bienes disminuyen su participación de 44.9% en el 1991 a 32.3% en el nuevo año base 2007.
Al comparar los resultados del nuevo año base 2007 con el PIB del año 1991, se observa que producto del crecimiento económico registrado en los últimos 16 años el tamaño de la economía es diez veces mayor, al pasar de un nivel de PIB de RD$123,426 MM a RD$1,374,270 MM (crecimiento porcentual de 1,013%). El análisis de la evolución del PIB desde el enfoque del Gasto, evidencia cambios importantes en sus principales componentes, tal es el caso del comportamiento registrado en el Consumo Público, cuyo crecimiento resultó muy por encima del que se observó en la economía total; ya que su valor aumentó treinta veces al pasar de RD$3,973 MM en el año 1991 a RD$123,854.2 MM en el año 2007. Otro resultado significativo lo constituye el comportamiento de las Exportaciones de Bienes y Servicios, variable que registró el menor ritmo de crecimiento en este período, al multiplicarse tan sólo por seis. Este resultado podría ser utilizado como una voz de alerta por las autoridades correspondientes a fin de que el modelo económico actual debiera reorientarse hacia una política de promoción y mayores incentivos a las actividades orientadas a las exportaciones.
Al analizar la Formación Bruta de Capital (FBK), se observa un incremento en su participación, dado un mejoramiento en la medición del sector construcción la cual se encontraba subvaluada porque los registros de los permisos de la construcción presentaban un valor de menor cuantía al valor real de la propiedad. La variable del Consumo Privado, obtenida de manera residual hasta el momento, presenta una disminución en la participación dentro del PIB ya que para este nuevo año base se contó con los resultados de la Encuesta de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH), realizada por la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE), lo cual permitió calcular en forma detallada el consumo privado.
Lo que habitualmente se calculaba en las Cuentas Nacionales era la corriente de bienes y servicios, es decir, qué se producía en un país. Sin embargo, las recomendaciones del SCN93 y SCN2008 incluyen además la cuantificación de quién los produce. En tal sentido, se presentan las cuentas de los sectores institucionales, clasificados en cuatro grandes sectores: Sociedades no Financieras, Sociedades Financieras, Gobierno General y Hogares, incluyendo las Instituciones Sin Fines de Lucro que Sirven a los Hogares (ISFLSH). En adición, se calcula la cuenta del Resto del Mundo que mide las transacciones con el exterior utilizando como fuente la Balanza de Pagos.
Con esta nueva compilación de las Cuentas Nacionales se obtiene la contribución de cada uno de los Sectores Institucionales al PIB. El 54.3% del valor agregado de la economía corresponde a las Sociedades No Financieras y el 35.4% a las actividades productivas de los Hogares. El Gobierno General y las Sociedades Financieras aportan el 5.9% y 4.5%, respectivamente. Cabe resaltar que en la nueva medición, se puede distinguir el aporte que hace el sector Hogares al PIB ya que se han calculado en forma independiente sus actividades productivas donde se incluye el sector informal, el cual anteriormente se calculaba en forma conjunta con las Sociedades no Financieras.
Para los trabajos del cambio de año base de las Cuentas Nacionales, el Banco Central de la República Dominicana, recibió asistencia técnica de expertos internacionales que apoyaron a los profesionales del Departamento de Cuentas Nacionales. En ese sentido, contamos con la colaboración de Magda Ascues, consultora principal del proyecto y Carmen Reyes, en la elaboración de las cuentas de hogares y matriz de empleo. Asimismo, hemos recibido la asistencia del CAPTAC-RD, en las personas de Dale Smith y Paul Armknecht, en la elaboración de los índices de precios del comercio exterior; Gilda Salvato, en la elaboración de Índice de Precios al Productor (IPP); Lisbeth Rivas y Michael Stanger en la orientación sobre indicadores para las cuentas trimestrales.
Adicionalmente, el personal técnico del Departamento recibe de manera permanente capacitación en el área de Cuentas Nacionales, a través de los seminarios y cursos en esta materia, impartidos por diferentes organizaciones internacionales, tales como el Fondo Monetario Internacional (FMI), Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), Consejo Monetario Centroamericano (CMCA), Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos (CEMLA), Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), entre otros.
En conclusión, la adopción de estas recomendaciones evidencia una mejoría considerable en la calidad de los resultados, al tiempo que facilita la comparación internacional y la armonización de las estadísticas económicas de la región.