El expresidente del Sistema de Integración Centroamericano (SICA), Manolo Pichardo, afirmó que el establecimiento de relaciones diplomáticas con China “era en un embarazo y este parto se veía venir”. Dijo que es un esfuerzo que hace el Gobierno dominicano desde antes de este período.
Reveló que los esfuerzos por el establecimiento de relaciones diplomáticas con China se venían haciendo desde el primer gobierno de Leonel Fernández.
“Recuerdo que aquel entonces participé en una reunión con una delegación del Partido Comunista Chino. En el encuentro estuvieron Juan Santamaría, Alejandro Herrera, Rafael Kasse Acta y otros y cuando planteamos la intención de establecer relaciones diplomáticas con ellos nos dijeron que para eso era necesario romper con Taiwán, debido a que no pueden haber dos embajadas de un solo país”, recordó.
Pichardo, también presidente de la Conferencia Permanente de Partidos Políticos de América Latina y El Caribe (Copppal), indicó que la postura de China dificultó, en ese momento, el establecimiento de relaciones diplomáticas. Sin embargo, señaló que en el último mandato de Leonel Fernández se volvieron a hacer intentos y romper con Taiwán, pero por un acuerdo entre los presidentes taiwanés Ma Ying-jeou y chino Xi Jinpin, lo que llamaron “diplomacia inteligente”, que consistía en abrir las relaciones comerciales y respetar lo que cada cual había logrado con el resto del mundo.
Pichardo consideró acertada la decisión de establecer relaciones con China porque a su entender República Dominicana no podía seguir de espaldas a lo que viene sucediendo en todo el mundo en materia geocomercial. “China no sólo es la primera potencia mundial en términos del producto interno bruto (PIB), sino que lidera en cuando la partida de compras. Es un hecho que no se puede ignorar en un contexto de recomposición geográfica y comercial en la que China juega un papel fundamental con la creación de nuevas rutas comerciales”, sostuvo.
Al hablar para el programa radial Súper 7 en la Mañana, Pichardo afirmó que República Dominicana puede ser un excelente puente comercial de China en la región y, además, aprovechar que más de 100 millones de chinos salen a hacer turismo por todo el mundo.
Parar Pichardo, es justo reconocer la labor que desarrolla Rosa NG, la representante comercial de República Dominicana en China, quien a su parecer deberá ser elevada a la categoría de embajadora. Considera que sus gestiones también han sido claves en todo el proceso, así como la de Fu Xinrong, su contraparte china en el país.
“Creo que ambas fueron piezas claves para convencer a las autoridades de lo ventajoso de esta reunión para República Dominicana. Pienso que hay que saludar a Rosa NG y los esfuerzos de Fu Xinrong”, expresó.