El balance de la economía dominicana para 2017, según la Escuela de Economía del Intec, sugiere que se tendrá un crecimiento del producto interno bruto (PIB) cercano al 4.5%, el cual se ubica por debajo del pronóstico inicial de 5.1% que habían realizado tanto el Banco Central de República Dominicana como el Fondo Monetario Internacional. Una de las causas de la desaceleración del ritmo de expansión del PIB, se vincula a una disminución en la inversión por el orden del 10.8% durante la primera mitad de 2017.
Paralelamente, se observa que el nivel de endeudamiento ha aumentado de manera vertiginosa durante los últimos años, llegando a un 52.4% del PIB a diciembre del año que casi termina. La preocupación por el tamaño de la deuda se debe a que esta no solo ha aumentado en cantidad, sino que su composición ha variado significativamente. Un ejemplo de ello es que, al 2013, y siempre siguiendo lo planteado por el Intec, el 72.4% de la deuda externa era con acreedores oficiales, en tanto que el restante 27.6% correspondía a acreedores privados. Al 2017, esto ha dado un vuelco, pues ahora cerca del 64% de la deuda externa es con sectores privados, lo que la hace más cara y de más corto plazo.
Resultados positivos del balance de la economía para el 2017, están en el control de la inflación, la cual se espera que se ubique en el nivel pronosticado por el Banco Central que es de un 4%, así como en el mejoramiento de la balanza de pagos, sobre todo en lo relativo a la cuenta corriente. En ese marco, se espera que el sector exportador supere los 10 mil millones de dólares en ventas de bienes al exterior durante este 2017.
Los pronósticos de crecimiento de la economía dominicana para el 2018 parecen ir en la misma vía que el 2017, estimándose una expansión del PIB cercana también al 4.5%, aunque se advierte que el incremento de la deuda externa puede convertirse en un serio problema para el país, sobre todo por la gran carga que representan los intereses con relación a los ingresos tributarios. Un entorno internacional favorable se prevé como un aliciente en el 2018.
Mientras esto sucede en la economía, los dos grandes líderes del país, Leonel Fernández y Danilo Medina, se confunden en un fuerte abrazo como regalo de Navidad para los nerviosos dirigentes y compañeritos de las bases del PLD. Con esto, el balance del 2017 termina positivo para el partido de gobierno, pero el 2018 será el escenario en donde veremos si el PLD, con primarias abiertas o cerradas, se encamina o no a probar el frío y oscuro sótano de la política dominicana en el 2020.