A las 6:00 de la tarde del martes 21 de octubre hubo un diálogo de coyuntura en la sede de posgrado de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), titulado “Competitividad de la economía dominicana”.
Como expositores invitados estuvieron César Dargam, vicepresidente ejecutivo del Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep); Jacqueline Mora, de Analytica; Carlos Flaquer, de DP World; y Guillermo Álvarez García-Godoy, vicepresidente de la Cámara Dominico Británica, quienes fueron introducidos al público por el profesor e investigador, Fernando Ferrán.
“Como tal, y fue anunciado así, el tema es solamente uno: ¿hacia donde ir en términos de competitividad? Como ven, está sobre el tapete. Para abordar el problema, básicamente se trata de no predicar más de lo mismo a los mismos que ya lo saben, sino tratar de que todos juntos, discutiendo, lleguemos a ideas, opciones y alternativas reales”, dijo Ferrán al introducir a los invitados.
La dinámica del evento fue explicada por Ferrán: las estadísticas serían presentadas por Morel, el comercio estaría a cargo de García-Godoy, el tecnológico por Flaquer y el aspecto político por Dargam.
“Cada dominicano tiene que centrarse en decir que esto es un tema fundamental y yo quiero saber cómo país en qué pie estoy parado, hacia dónde van a ir mis decisiones y cómo puedo aportar desde donde estoy”, dijo Mora al iniciar su exposición. A seguidas presentó una visión rápida de la competitividad de República Dominicana desde la óptica del Foro Económico Mundial.
En tal contexto, señaló, existen cuatro puntos fundamentales. El primero es una legislación fiscal; el segundo, la flexibilidad del mercado laboral, seguido por el acceso a la tecnología y, por último, el acceso al crédito.
“Si nosotros tendríamos que mirar al futuro, en términos de competitividad, yo creo que estos cuatro elementos están sobre la mesa. Hoy en día estamos más preparados que antes. Podemos hacerlo”, concluyó Mora con una actitud optimista.
Flaquer, de su lado, quien se introdujo advirtiendo que “no soy economista, no soy abogado ni politólogo”, antes de decir que le tomaba a un amigo suyo la definición de lo que es ser un ejecutivo tipo “V”: ve y haz tal cosa, ve y resuelve”.
Su intervención trató sobre la innovación tecnológica en la competitividad de la economía nacional. Explicó que tiene un potencial importante en las nuevas tecnologías y que ahora hay en un punto de inflexión a nivel mundial, pues la globalización y la tecnología se unen cada vez más. Preguntó cómo se adatará el país esta nueva realidad.
La pregunta que se hizo el expositor lo llevó a responder que todo hoy en día se está digitalizando y que las personas, empresas o país que no se adapte a esa realidad, quedarán rezagado en un segundo o tercer plano.
“No es el más fuerte quien sobrevive, es el que mejor se adapta al cambio”, dijo Flaquer. Por demás, utilizó la teoría exponencial para aclarar que “nosotros como país tenemos que empezar a ver esto y no ver un crecimiento lineal, sino que enfocarnos cómo podemos apalancarnos sobre lo existente para lograr un crecimiento exponencial”.
Sostuvo que la competitividad es la capacidad de competir y entender qué es lo que sucede fuera del entorno para entonces plantearse qué hay que hacer y aprovechar lo que ya está creado, para impulsar el país.
Oportunidades
Álvarez García-Godoy, en un mensaje preciso, se enfocó en la competitividad de República Dominicana. Planteó que el 80% de las exportaciones de bienes y servicios al Reino Unido son agrícolas.
Mientras que Dargam, como representante del Conep, cuestionó sobre las razones por las que República Dominicana no es lo suficientemente competitiva. Definió la competitividad como el proceso de producir bienes o servicios, al menor costo posible y con la mayor calidad, aun así teniendo la capacidad de poder suplir la demanda que exista.
“Este tema se ha puesto de moda, pues ahora todo el mundo habla de competitividad. La pena es que ahora todos estamos hablando del tema porque algunas de las lagunas que han surgido en esta materia, precisamente se deben a tareas pendientes que aún haciéndolas ahora, nos tomará algo de tiempo lograr conectar y colocarnos donde nosotros deberíamos estar”, apuntó.
Afirmó que está convencido de que el país posee un altísimo potencial para seguir desarrollando negocios y que las fallas que presenta con respecto a competitividad son superables.