Cada año el Congreso Nacional aprueba el Presupuesto de Ingresos y Ley de Gastos Públicos para el año siguiente. Ese presupuesto es una ley y en él se establecen los montos que el Gobierno tomará prestados para cubrir parte de sus gastos, siempre que haya déficit.
Pero los montos correspondientes a endeudamiento deben ser aprobados aparte por el Congreso Nacional como una ley independiente. Es decir, si el Gobierno va a tomar US$1,000 millones prestados, debe incluirlos en el Presupuesto y además debe someter un proyecto de ley donde el Congreso aprueba la emisión de ese monto en deuda.
Yéndonos un poco al pasado, recordemos que en noviembre del año 2016, el Congreso Nacional aprobó una ley que autorizaba al Gobierno a emitir US$600 millones en bonos soberanos para cubrir parte del costo de la Central Termoeléctrica Punta Catalina. De esos US$600 millones, se emitieron US$100 millones en diciembre de 2016, mientras que los US$500 millones restantes se dejaron para este año.
En diciembre del año pasado el Gobierno sometió al Congreso Nacional un proyecto de presupuesto complementario en el que pedía a las cámaras legislativas autorizar un aumento del endeudamiento originalmente programado para incluir ahí los US$100 millones (RD$4,650 millones) que se estaban emitiendo en bonos para Punta Catalina.
Posteriormente, el Congreso Nacional aprobó el Presupuesto de este año en el que se establece que el Gobierno contratará deudas por un total de RD$171,886.1 millones para cubrir el déficit fiscal y los compromisos de deuda vencida.
Sin embargo, en ese monto de compromiso de deuda aprobado para este año no estaban incluidos los US$500 millones (aproximadamente RD$23,900 millones) que el Congreso había aprobado por ley a finales de 2016 como parte del paquete de bonos para Punta Catalina, los cuales fueron emitidos por el Gobierno el 13 de junio de este año.
Para cumplir con el requisito legal de incluir en el Presupuesto Nacional los montos totales de deudas que se emitan dentro del año de vigencia de esa pieza legislativa, el Gobierno acaba de remitir al Congreso Nacional un proyecto de presupuesto complementario en el cual le pide que le autorice a que el monto de endeudamiento aprobado de RD$171,886.1 sea aumentado a RD$201,400.9 millones, para un total adicional de RD$29,514.7 millones.
En ese mismo pedido, el Gobierno le explica al Congreso que en esos RD$29,514.7 millones están incluidos los US$500 millones (aproximadamente RD$23,900 millones) de los bonos que se emitieron en junio de este año para Punta Catalina.
Esto deja claro que el Poder Ejecutivo no está solicitando dinero adicional para Punta Catalina. Lo que ha hecho es formalizar dentro de las estimaciones de deuda programada para este año el monto de los bonos soberanos que fueron aprobados por ley y emitidos este año, pero sin haber sido incluidos en el Presupuesto de Ingresos y Ley de Gastos Públicos.
De todas formas es preocupante que se aumente el tope de deuda de este año, aun cuando no sea para Punta Catalina.
Ese proyecto de presupuesto complementario también incluye otras operaciones como la disminución de apropiaciones de varias instituciones del Estado por un monto de RD$29,567.2 millones y su reasignación a otro conjunto de instituciones.
Se incluye, además, en ese proyecto de presupuesto complementario, el ingreso de RD$1,869.5 millones provenientes de utilidades logradas por la Empresa de Transmisión Eléctrica Dominicana (ETED), el Fondo Patrimonial de la Empresa Reformada (Fonper) y del Instituto Dominicano de las Telecomunicaciones (Indotel).
También, el Poder Ejecutivo pide “redistribuir” un monto similar de los recursos asignados para la recapitalización del Banco Central equivalente al 0.7% del producto interno bruto (PIB). Este aspecto no está muy claro y sería un buen punto para que los legisladores, especialmente de la oposición, soliciten al Poder Ejecutivo más explicaciones.
Y a propósito de legisladores de la oposición, fue muy penoso ver en algunos medios a los voceros de los bloques de diputados de los dos principales partidos de oposición ofrecer declaraciones empíricas sobre el proyecto de presupuesto complementario sin siquiera haberlo leído. Por favor, documéntense antes de hablar para que hagan una oposición más efectiva. Es lo que necesita el país.