Señor director:
Todos los días vemos en las calles de nuestra capital a muchos ciudadanos dominicanos, y hasta de otras nacionalidades, pidiendo dinero o lo que sea en las esquinas. Es un panorama desalentador.
Nuestra capital y las principales ciudades no pueden “darse este lujo”, porque no tiene nada gracioso encontrarse con personas que se dedican a ser pedigüeños con la excusa de que no pueden trabajar. En algunos casos sabemos que hay estafadores.
Falta una política de Estado que dé seguridad social a estas personas, en el caso de los dominicanos. Deberíamos tener programas de educación, salud y trabajo para quienes no pueden valerse por sí mismos. Salir en ayuda de estas personas, además de ser una responsabilidad social, es un acto de humanidad que se agradecerá mucho.
Además, no creo que este panorama sea una buena fotografía para los turistas que nos visitan. Algo habrá que hacer con estas personas que necesitan ayudan.
María del Carmen Ventura
Ciudadana