No son nuevas las quejas de los productores agropecuarios. Sus reclamos, por más notas de prensa que envíen las autoridades del Ministerio de Agricultura diciendo que el campo avanza y que hay crédito para la producción, evidencian que no la están pasando bien.
Y no se trata de que las autoridades hagan o no el esfuerzo. Todo parece estar relacionado con la capacidad que tienen algunos “líderes” del sector de aprovechar el agua limpia y dejar pasar algunas gotas para los más pequeños. El auxilio de los pequeños productores, a propósito de las inundaciones recientes, es una tarea casi imposible.
Para recibir el apoyo financiero es necesario estar asegurado o tener alguna relación cercana con un funcionario que “lo meta en la lista”. Y como son agricultores, muchos de los cuales no entienden que son de vital importancia para la sociedad y la paz que vive este país, simplemente no saben cómo reclamar apoyo oficial ante su desgracia.