La economía dominicana pierde dinamismo, al bajar de una tasa de crecimiento en su producto interno bruto (PIB) de 7.5% para 2014, a 7% en 2015, a 6.6% en 2016 y colocarse en 4% en el primer semestre de este año, por debajo de las expectativas de 5% del Banco Central (BC).
La observación la hace la Escuela de Economía de la estatal Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), en un informe en el que coincide con las preocupaciones externadas por el Instituto Tecnológico de Santo Domingo (Intec).
“Esta ralentización también se expresa en una desaceleración de las ventas totales reales de la economía registrada por la Dirección General de Impuestos Internos (DGII), las cuales crecieron en 2014 un 7.6%, en 2015 bajaron al 4.2% y en 2016 crecen a penas a una tasa de 2.8%”, plantea la UASD, en el informe difundido por un equipo encabezado por Antonio Ciriaco Cruz, director de su Escuela de Economía.
Recuerda que el crecimiento de los últimos años se produjo en un contexto de precios del petróleo relativamente bajos y cambios graduales en la política monetaria en Estados Unidos. Plantea que, aunque existe un control de las distintas variables macroeconómicas (tasa de inflación y tipo de cambio), la economía “acumula un conjunto de desequilibrios macroeconómicos”.
Además del déficit fiscal del sector público y el histórico en la cuenta corriente de la balanza de pagos, deplora que “la economía dominicana no está generando el ahorro suficiente para cubrir la inversión que demanda, lo que ha provocado que el país haya crecido durante los últimos años con un mayor nivel de endeudamiento”.
El mercado laboral preocupa a la UASD. Cita la Encuesta Continua de Fuerza de Trabajo (ECNFT) para explicar que el empleo adicional en junio de 2016 era de 203,038 personas con respecto al mismo periodo de 2015. “En septiembre de 2016 la población ocupada adicional fue de 194,873 personas con respecto al mismo periodo de 2015, y en diciembre de 2016 de 115,835 con respecto al mismo periodo de 2015”.
Deplora la creación de empleo de baja calidad. “La mayoría están concentrado en el renglón ‘Otros servicios’, el cual agrupa el 19.46% y en el sector ‘Comercio’, que agrupa el 19.60%”, refiere.
También el Intec muestra pesimismo. “Durante el segundo trimestre de este año la economía exhibió un frenazo en su tasa de crecimiento del PIB, al reducir de 5.3% en el primer trimestre a un 2.7 % en el periodo abril-junio”. “De seguir esta tendencia, los pronósticos de recaudación de impuestos para la elaboración del Presupuesto, el endeudamiento y las metas de generación de empleos se verían afectados a final de año y reducidas las expectativas programadas por el Gobierno”.
Al presentar el informe, Rafael Espinal, coordinador de la carrera de Economía, y el decano, Franklin Vásquez, del Intec, recomendaron al Gobierno promover el establecimiento de salarios mínimos en los sectores regulados más allá de “la desidia” que, según afirman, exhibe el Comité Nacional de Salarios.
“El Banco Central debería optar por una meta de inflación más cercana al borde superior del 4% y el sector privado por una flexibilización de la rigidez del salario para propiciar un estímulo mayor al consumo y una mejor distribución de la remuneración de los factores productivos”, indica el Intec.
El Gobierno exhibe optimismo
El Banco Central anunció que apuesta a una “política fiscal más activa” durante el segundo semestre que, junto a las medidas que viene adoptando, “arrojarían que la tasa de crecimiento anual del PIB al cierre del presente año se ubicaría en torno a su crecimiento potencial de 5%, mientras la inflación se acercaría al límite inferior del rango meta de 4% ± 1%”.
De acuerdo a las cifras preliminares presentadas por la entidad, la economía dominicana experimentó este año una moderación en el crecimiento del PIB, “al registrar una variación acumulada de 4% durante enero-junio”.
El Banco Central asegura que, al reducir la tasa de política monetaria (TPM) en 50 puntos básicos (de 5.75% a 5.25%) y disminuir el coeficiente de encaje legal en 2.2 puntos porcentuales (una liberalización de unos RD$20,400 millones), adoptó una “postura de política más expansiva”.