Señor director:
Con relación al reportaje derivado de su entrevista con funcionarios del Banco Central, donde se aborda el tema del desempleo y el crecimiento económico, aprovecho la oportunidad para comentar lo siguiente.
Una cosa son las políticas públicas y/o monetarias para dinamizar la economía, independientemente de sus altibajos, y otra el crecimiento sostenido basado en la constante creación de riqueza material (bienes, servicios y obras de infraestructura de carácter productivo), independientemente de esos altibajos. No tomo en cuenta lo que pueda suceder en uno u otro escenario sujeto a circunstancias y/o factores internos/externos en cada caso, sino a la reducción o eliminación de la desigualdad (desempleo y pobreza) basada en el aumento del empleo consecuencia de la constante creación de riqueza público-privada para reducir o eliminar la pobreza como segunda pata de la desigualdad.
Por tanto para reducir o eliminar la desigualdad (cosa que los funcionarios del Banco Central no mencionan en la entrevista) el Estado tiene que comportarse como sector productivo de valor agregado como otro cualquiera para definir/calcular lo que yo denomino PIB Estatal. La unión del PIB Estatal y del PIB de los sectores productivos conduce al PIB Nacional y por ende al bienestar colectivo, independientemente, vuelto y repito, de los altibajos de la economía. En cualquier momento, circunstancia o época.
Sin embargo para lograr el bienestar colectivo, sea en República Dominicana o en cualquier país pobre en el mundo, es un imperativo la firma del pacto por la productividad entre los sectores público y privado para la puesta en marcha del lado práctico de la desigualdad. Lo que planteo (PIB 2.0 – Pacto por la productividad y/o Teoría de la Desigualdad”) lo considero válido para cualquier economía pues cualquier país desarrollado también tiene sus desequilibrios.
He hecho esto con la finalidad de evitar el juego de palabras y/o de cifras y palabras en todo lo que tiene que ver con el problema de la desigualdad, de manera especial cuando no se toma en cuenta las variables que la perjudican, para no entrar en otros detalles. He escrito unos 32 artículos sobre este tema sin reacción contraria hasta la fecha. Todavía estoy a la espera de que alguien me diga que estoy equivocado.
Eduardo Díaz Franjul
Empresario