[dropcap]G[/dropcap]raduarse de la universidad o realizar una maestría implica una serie de gastos que no todos los jóvenes pueden asumir. De ahí nace la misión que tiene la Fundación Apec de Crédito Educativo (Fundapec): “facilitar el acceso a recursos financieros para fomentar la educación, contribuyendo con el desarrollo económico y social de la nación”.
Esa organización privada sin fines de lucro fue creada por Acción Pro Educación y Cultura (Apec), el 23 de mayo de 1967 y desde esa fecha ha otorgado créditos educativos a más de 113,000 jóvenes para carreras técnicas, universitarias, maestrías y postgrados, con una inversión de más de RD$5,000 millones.
La institución inició con un millón de pesos que recibió del Gobierno, pero actualmente trabaja con fondos propios y posee una cartera de RD$1,492 millones, además cuenta con fondos de organismos internacionales como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la agencia Omtrix de Costa Rica.
El 60% de los préstamos otorgados pr la Fundapec corresponde a grado, el 25% a maestrías locales y el resto a maestrías en el exterior, diplomados y cursos técnicos en el país, y el 5% a educación media y básica. El mayor porcentaje de usuarios son de Medicina y Odontología, seguidos de Administración de Empresas, Mercadeo, Ingeniería y Derecho.
Garantía
La directora ejecutiva de Fundapec, Regla Brito, señala dentro de las ventajas del crédito educativo, la tranquilidad que ofrece a la familia de que el beneficiario va a contar con los recursos económicos necesarios para terminar sus estudios.
“Hay una garantía de que la persona podrá formarse y terminar su carrera sin esa preocupación que puede representar la parte económica. Es un aporte que hacemos a la sociedad, porque el Gobierno no puede cubrir gratuitamente toda la parte de educación superior y técnica, que son las necesidades que tiene hoy en día la economía nacional”, explica.
La fundación recibe aproximadamente 400 solicitudes mensuales y el porcentaje de rechazo es de un 5%, debido a que los requisitos básicos para acceder al financiamiento es el pensum de la carrera, un promedio mínimo de calificaciones de 70 y un fiador si el joven no trabaja, que puede ser uno de los padres.
“El nivel de aprobación es bastante alto porque la finalidad nuestra es trabajar de la mano para que puedan alcanzar la carrera que han escogido”, afirma Brito.
Algunos padres usan los préstamos que ofrece la entidad para cubrir la educación básica de sus hijos en los colegios.
También son utilizados para la compra de los equipos que necesitan los estudiantes. “A veces hay implementos que se necesitan, que son muy costosos, y le proveemos el financiamiento para el mejor desempeño de su carrera”, asegura.
Dentro de los montos que que se pueden financiar incluyen el costo total o parcial de los estudios, libros, transporte y manutención, en caso de jóvenes del interior del país que necesitan alquilar una vivienda y carecen de los recursos.
Además, Fundapec administra los fondos que poseen las empresas para la capacitación de sus empleados o de los hijos de sus trabajadores.
La tasa de interés varía dependiendo del tipo de estudios que solicite el alumno y puede permanecer fija durante tres o cuatro años.
Los beneficiarios tienen hasta 10 años desde el inicio de los estudios para pagar el préstamo y la facilidad para determinar qué forma de pago es más conveniente para ellos.
La directora ejecutiva de la institución asegura que la modalidad más recurrida es la que cuenta con la gracia de capital durante el tiempo de estudio, porque solo se pagan los intereses del crédito educativo en ese período y cuando el estudiante termine amortiza el capital más intereses.
Existen cuotas únicas, que se establecen de acuerdo a las necesidades de los padres.
“Lo importante es que el dinero no se le entrega directamente al estudiante, nosotros pagamos la universidad que es lo que nos puede garantizar que el dinero ha sido utilizado para lo fines que fueron entregados”, indica Brito.
“Yo apuesto a ti”
A través de este proyecto, la institución creó un fondo con los aportes de exusuarios del crédito educativo, donantes y empresas que quieran apoyar a los estudiantes que desean ser profesionales y que no cuentan con los recursos necesarios para lograrlo.
“Son personas que hemos ido contactando y ellos nos refieren a jóvenes que quieren apadrinar en cuanto a la carrera, parcialmente o en su totalidad, y nosotros trabajamos con la parte no cubierta”, destaca la directora ejecutiva de Fundapec, Regla Brito.
Asimismo, la entidad cuenta con préstamos para jóvenes de escasos recursos, mediante un acuerdo con la organización estadounidense Kiva. Con ese fin, la entidad, con sede en California, captura inversionistas a través de su página web.