Taiwán expresó su “indignación” por el anuncio de Panamá de romper sus relaciones diplomáticas al momento de establecerlas con China, hecho que catalogó como un “acto desleal”, y lo atribuyó a la influencia económica del gigante asiático.
Inmediatamente, las autoridades de Taipei anunciaron que el retiro de todo el personal de su embajada y la suspensión de “todos los programas de asistencia y de cooperación bilateral” con el país centroamericano, en los que se suscribe un acuerdo de cooperación no reembolsable de 72 millones de dólares para el periodo 2014-2019.
No obstante, el trabajo de cooperación que el Sistema de la Integración Centroamericana (Sica) mantiene con Taiwán, uno de sus principales benefactores, se mantendrá pese a la ruptura de relaciones de Panamá con la nación asiática, dijo el canciller salvadoreño, Hugo Martínez.
“No veo ninguna implicación, ninguna afectación a la proyección de trabajo del bloque Sica”, señaló Martínez en una conferencia de prensa y agregó que El Salvador “no tiene en el radar” el establecimiento de relaciones con los países que actualmente no las tiene, incluida China.
El jefe de la diplomacia salvadoreña recordó que una situación similar se dio en 2007, cuando Costa Rica rompió relaciones con Taiwán y eso no afectó las “buenas relaciones que históricamente hemos tenido” entre el Sica y ese país.
El presidente panameño, Juan Carlos Varela, anunció este lunes el establecimiento de las relaciones diplomáticas con China, que actualmente es el segundo usuario más importante del Canal de Panamá.
En un comunicado oficial difundido el lunes por la Presidencia panameña se indicó que ambos Gobiernos acordaron “el envío pronto y mutuo de embajadores y brindar, en base de reciprocidad, toda la ayuda necesaria para la instalación en sus respectivas capitales la Embajada de la otra parte así como facilitar el desempeño de sus funciones”.
Taiwán es una de los principales benefactores del Sica y en el año 2000 fue admitido como primer miembro observador extra regional del organismo regional, al que solo entre 2015 y 2016 asignó 23 millones de dólares para la implementación de proyectos de cooperación.
Panamá, 13 jun (EFE).- La Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura de Panamá (CCIAP) se mostró hoy confiada en que el establecimiento de las relaciones diplomáticas entre Panamá y China traerá “beneficios” al país centroamericano en materia comercial y de inversión en campos como el tecnológico y el logístico.
El presidente de la CCIAP, Inocencio Galindo De Obarrio, valoró como una “decisión estratégica” la apertura de Panamá hacia China, anunciada el lunes por el presidente panameño, Juan Carlos Varela, y concretada por los dos Gobiernos con la firma de un documento en Pekín.
“Con esta decisión, se abre la posibilidad de pactar un acuerdo comercial con un país de más de 1,300 millones de personas, incrementando las exportaciones e importaciones, además, se atraerán nuevas inversiones a Panamá, especialmente en el campo tecnológico y logístico, por mencionar algunos”, dijo el presidente del gremio empresarial en una declaración pública.
La CCIAP citó datos estadísticos según los cuales en el 2016 Panamá exportó a China bienes y servicios por valor de 50,9 millones de dólares, un 22,9 % más que el año anterior, mientras que las importaciones provenientes del gigante asiático sumaron 1.183 millones de dólares.
Panamá vende a China principalmente desperdicios y desechos de cobre; desperdicios y desechos de aluminio; crustáceos; madera en bruto y perfilada longitudinalmente; café, cascara, cascarilla y sucedáneos de café, entre otros, recalcó el gremio.
Para avalar la decisión de Varela, la CCIAP apeló a los mismos argumentos que presentó anoche el mandatario: que China es el segundo usuario más grande del Canal de Panamá y el primer proveedor de la Zona Libre de Colón (ZLC), la mayor del hemisferio y ubicada en la costa atlántica del país.
“Hasta el día de hoy la República de Panamá carecía de relaciones diplomáticas con la República Popular de China, un Estado que por sí solo representa el 20% de la población mundial y constituye la segunda economía más grande del mundo. Esta es una situación que un mandatario responsable no podía seguir perpetuando”, argumentó Varela.
Además de esos argumentos, Galindo recalcó que el gigante asiático “ha incrementado su interés en invertir en Latinoamérica”.
“Confiamos que esta es una decisión estratégica que traerá beneficios para nuestro país”, añadió el presidente de la CCIAP, una de las principales de Panamá y que agrupa a más de 1,600 empresas de 15 sectores económicos.
Respecto a Taiwán, con el que Panamá rompió relaciones a consecuencia del reconocimiento de la política de “Una sola China”, la directiva de la CCIAP expresó que espera que “por los históricos lazos de amistad” que les han unido, “a futuro se desarrolle una estrategia común para estabilizar las relaciones comerciales y de inversión”.
La vicepresidenta y canciller panameña, Isabel De Saint Malo, reivindicó la “decisión soberana” de su país de “reconocer la política de Una Sola China”, que, dijo, “responde a una decisión estratégica y geopolítica (…) y ha tenido únicamente como base el respeto mutuo y la búsqueda permanente del bienestar de nuestro pueblo”.