[dropcap]L[/dropcap]a confrontación que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, mantiene con México, representa una oportunidad para Panamá, cuya posición geográfica y su conectividad lo convierten en un aliado logístico ideal para las importaciones y exportaciones mexicanas hacia los países de Centro y Suramérica.
México, junto con Chile, Colombia y Perú forman parte de la Alianza del Pacífico. Estos cuatro países concentran el 40% del producto interno bruto (PIB) de América Latina.
Panamá es candidata a formar parte de la Alianza del Pacífico, pero uno de los requisitos para ingresar a esta alianza regional es mantener tratados de libre comercio (TLC) con cada uno de sus miembros.
Panamá no cuenta con un TLC con Colombia, ya que condicionó su aprobación a la resolución del conflicto surgido tras la imposición del arancel mixto por parte de Colombia a las reexportaciones de textiles y calzados procedente de la Zona Libre de Colón (ZLC).
Panamá y Colombia firmaron el TLC en septiembre del 2013, luego de tres años de negociaciones, que incluyeron siete rondas de negociaciones.
Ignacio Caparrós, directivo de Pro México, dijo que “Panamá es una puerta de entrada para Centro y Suramérica, con un hub que pueden aprovechar las empresas mexicanas”.
Diversificar inversiones hacia América Latina
“La situación que está viviendo México con EEUU es una alerta para nuestras empresas que tienen que diversificar su inversiones hacia Latinoamérica, que representa el 7.2% de las exportaciones de México”, indicó Ignacio Caparrós.
El 80% de las exportaciones mexicanas tienen como destino EEUU y Canadá, con los que suscribió el Tratado de Libre Comercio de América del Norte, vigente desde 1994 y que Trump quiere renegociar.