[dropcap]E[/dropcap]l comportamiento del mercado de divisas, principalmente en los últimos cuatro meses, ha generado preocupación entre los agentes económicos. La primera variable que se discute es un desfase entre la oferta y la demanda de dólares.
En los últimos doce meses el peso dominicano se ha devaluado 2.63% frente a la moneda estadounidense, que pasó de una tasa ponderada de RD$45.66 a RD$46.86. Esto significa que la variación absoluta ha sido de apenas RD$1.20, aproximadamente.
Las autoridades monetarias, como parte de su objetivo de mantener a raya la inflación, han previsto medidas que den un mayor nivel de transparencia entre la compra y venta de divisas en el mercado local.
El gobernador del Banco Central (BC), Héctor Valdez Albizu, ha tratado el tema con los ejecutivos de la Asociación de Bancos Comerciales (ABA). Hay prácticamente un consenso para garantizar la estabilidad que requiere el mercado.
¿Qué se ha propuesto? En este momento el BC inició el proceso de licitación para la instalación de una plataforma electrónica de negociación de divisas con el objetivo de hacer más eficientes y transparentes las operaciones del mercado, para cuya puesta en funcionamiento pidió la colaboración de las entidades de intermediación financiera.
El comportamiento del mercado cambiario, haciéndose énfasis en la oferta y la demanda de los agentes económicos, especialmente de los vinculados con los sectores productivos, fue tema de conversación entre las autoridades monetarias y representantes de la ABA, entre los que estuvieron su presidente, José Manuel López Valdez, así como los demás miembros: Ignacio Guerra, Steven Puig, Mark Silverman, Robert Williams, José De Moya Cuesta, Fausto Pimentel y Máximo Vidal. Por la Liga Dominicana de Asociaciones de Ahorros y Préstamos (Lidap) participaron Gustavo Ariza y Rafael Melo.
Las estadísticas de generación de divisas establecen que no hay por qué preocuparse. La entrada total fue de US$24,300 millones en 2016, mientras que las reservas internacionales cerraron con máximos históricos de US$6,047.4 millones, en el caso de las brutas, y las netas en US$6,046.7 millones, equivalentes a 3.9 meses de importación.
El presidente del Banco Popular, principal entidad financiera privada del país, entiende que el hecho de que algunas empresas estén buscando dólares y no encuentran las cantidades que necesitan tiene un factor positivo y otro que no es tan positivo. “Lo primero que te puedo decir es que hay más dólares que nunca en el mercado”, afirmó Manuel A. Grullón durante un encuentro con ejecutivos de medios de comunicación la semana pasada.
Sostuvo que cuando se analizan los indicadores, tales como remesas, exportaciones y los proyectos en zonas francas se ve que la economía tiene más dólares que nunca. A su entender, el tema está en dos factores: un incremento en la demanda que habría que analizar la causa para determinar si es permanente o momentánea y, como segundo factor que no se puede descartar, sería una demanda ficticia.
“Nosotros hemos vendido más dólares que nunca en el sistema financiero. ¿Dónde está el problema? El problema es muy sencillo: el incremento de la demanda está un poquito por encima. Y no estamos hablando de cifras de millones de dólares ni nada (por el estilo). Está un poco por encima, ha crecido más que la oferta de dólares. Pero quiero que esté claro que la economía dominicana, entre las remesas, turismo, zonas francas y las exportaciones, (…) fascina y nos lo han expresado los banqueros internacionales”, destacó, mientras recuerda que el sector agropecuario, por lo que padeció el año pasado, es el que ha generado menos divisas.
Grullón aseguró que los indicadores de crecimiento de la economía son reales, lo cual es visto por los inversionistas extranjeros y el sistema financiero internacional. Afirmó que en la economía dominicana “todo va bien”.
En el caso del Banco Popular, dijo, no tiene grandes necesidades de dólares y que lo único que hace es comprar la divisa a los clientes y luego la vuelve a vender a quienes la necesitan. Indicó que lo importante ahora es ver cómo se equilibra la oferta y la demanda, para lo cual hay mecanismos para lograrlo y se han utilizado en el pasado.
“Yo quisiera creer que temporalmente ese desfase que hay se puede corregir y eso es lo que hay que corregir. Si tú le pones al mercado US$100 millones más de oferta, pero le pones US$150 millones más de demanda, te van a faltar US$50 millones en ese mes y luego te faltarán otros US$50 el mes que viene y así sucesivamente”, consideró.
Grullón expresó que es un tema de expectativa, pues entiende que cuando se prevé que puede haber un alza los agentes del mercado se adelantan a comprar dólares que (en realidad) no necesitan.
“Si todos aquí estamos convencidos de que hay más demanda que oferta y de que eso presiona la tasa de cambio hacia arriba, y pensamos que en marzo vamos a hacer un viaje a Nueva York o a donde sea, pudiera estar adelantando la compra de los dólares que necesitamos y presionamos el mercado innecesariamente”, estimó.
Compromiso
Acorde a la plataforma que el Banco Central plantea para hacer más transparentes las transacciones de divisas, Grullón sugiere que el mercado puede comprometer la venta de dólares a futuro, a fin de quitarle presión al mercado de divisas dominicano, lo cual es fácil con la entrega de un certificado a quienes deseen dólares. Explicó que se trata de asumir el compromiso de una tasa para una fecha específica, lo que libera la demanda presente.
Aunque no existe o no está en práctica en el sector financiero, Grullón dijo que se ha utilizado y que ahora mismo la banca está estudiando ese mecanismo para apoyar en la consecución del equilibrio del mercado cambiario. A su entender, la incertidumbre es peor que saber que “esto me costó tanto”.
Consideró que lo que hay que manejar es la demanda, pues la oferta está bien. Indicó que hay ciertos negocios que pudieran hacerse porque pueden inyectar dólares en cantidades importantes o promover la inversión extranjera.
El presidente del Banco Popular dijo que “las remesas son las remesas y no se puede hacer una campaña para que todo el mundo mande más dinero”, pero sí traer más capitales a través de los inversionistas. Otra opción es apoyar a los exportadores dominicanos.
“Tenemos una economía sana en el aspecto de su crecimiento o en su metabolismo. Es una economía que en cierto modo está hasta frenada, por lo que podría crecer más, pero está un poco frenada porque si no se frena, entonces te puede traer otro problema como es la inflación o, peor, un alza en las tasas de interés que sería funesto para todo el mundo, incluyendo los bancos”, sostuvo.
Recordó que en otras ocasiones ha dicho que a los bancos les va mejor mientras más bajas son las tasas de interés, ya que la tasa de recuperación de los préstamos es mayor. Dijo que cada vez que la tasas sube levemente hay que calcular cuánto se deteriorará la calidad de la cartera.
Encuentro
En su reunión con ejecutivos de la ABA y Lidap, Valdez Albizu destacó el aporte del sector financiero a la economía dominicana, señalando que la intermediación financiera creció un 11% en 2016, siendo uno de los sectores de mayor crecimiento, junto con minería (26.5%), agropecuaria (9.6%) y construcción (8.8%).
Resaltó que durante la última década, el sector financiero ha exhibido un comportamiento positivo, habiéndose adecuado a las normas y reglamentos que fue necesario adoptar después de la crisis bancaria de 2003, lo que le permitió sortear la que surgió a nivel internacional en 2009, y mostrando elevada solvencia, producto del incremento en los niveles de capitalización, baja morosidad, elevadas reservas de cobertura y alta rentabilidad, tanto del patrimonio como de los activos.
En el encuentro se dio seguimiento a la colocación de los recursos de encaje legal liberados por el Banco Central, ascendentes a alrededor de RD$22 mil millones para financiar la construcción de viviendas de bajo costo, mediante fideicomisos públicos y público-privado, con lo cual se dinamizaría la economía, además de contribuir a la reducción del déficit habitacional.
Escasez de dólares
La Asociación de Empresas Industriales de Herrera y Provincia Santo Domingo (AEIH) demandó de las autoridades monetarias y del sistema financiero una explicación diáfana sobre la persistente escasez de dólares en el mercado.
El presidente de la entidad, Antonio Taveras Guzmán, reiteró que los empresarios siguen teniendo grandes dificultades para conseguir la divisa requerida para sus compromisos internacionales, como reposición de inventarios y pagos de facturas.
“Nos preguntamos cómo es que en una economía que recibió divisas por un monto de US$24,300 millones el pasado año, con un aumento absoluto de US$1,600 millones, exista racionamiento en la venta de dólares”, reflexionó el dirigente empresarial.
Dijo que en la actualidad ni la banca nacional ni el mercado cambiario en general están en capacidad de suplir los dólares necesarios para pagar compromisos internacionales.
“Nuestras empresas están quedando muy mal con los suplidores internacionales, debido a que no encontramos los dólares para honrar nuestros compromisos”, dijo.
Pidió una explicación al Banco Central en el sentido de que si la economía está generando suficientes divisas para honrar los compromisos como país, y se tiene una reserva de US$6,000 millones, entonces qué o quién produce la escasez.
Expuso que el Banco Central, como rector de la política monetaria y financiera, debe de tomar las medidas necesarias para que esto no siga sucediendo, mientras que el sistema financiero está en la obligación de dar una explicación convincente.