[dropcap]E[/dropcap]l sistema de pensiones en Chile, a juzgar por lo que plantean los trabajadores, está desprestigiado, no rinde beneficios y sólo ha servido para estafar a los cotizantes.
El sistema de capitalización individual, como fue copiado aquí en República Dominicana, se inició en 1981 y hoy se ha convertido en un fiasco. Los trabajadores chilenos se sienten estafados por estas empresas.
“No existe otra forma de recuperar lo que nos pertenece, nuestro fondo de pensiones y nuestro derecho esencial por una vejez digna”, dijo a los periodistas la coordinadora de la organización No+AFP, Carolina Espinoza durante las jornadas de protestas escenificadas en todo el país.
Aquí, en el patio, deberíamos tomar medidas a tiempo. Chile es un espejo de lo que pudiera suceder en República Dominicana. Los chilenos cuentan experiencias muy amargas. Las pensiones, al parecer, no les alcanzan para vivir dignamente.