El petróleo intermedio de Texas bajó el martes un 1.37% y cerró en 39.51 dólares el barril, por primera vez por debajo de la barrera psicológica de los 40 dólares desde el pasado mes de abril.
Al final de las operaciones a viva voz en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos futuros del WTI para entrega en septiembre, todavía los de más próximo vencimiento, bajaron 55 centavos de dólar respecto al cierre anterior.
El petróleo de referencia en Estados Unidos borró los avances que se había apuntado en la primera hora de contrataciones y al final terminó el día por debajo de 40 dólares, algo que no ocurría desde comienzos de abril pasado.
El precio del llamado “oro negro” sigue presionado por el miedo que se ha instalado en los últimos días entre los inversores a que persista la saturación del mercado por un exceso de oferta en la segunda mitad del año.
Este miércoles, el Departamento de Energía estadounidense dará a conocer el estado de las reservas semanales de petróleo y otros productos derivados, que siguen en máximos que no se veían desde hace ocho décadas.
El último dato disponible fue publicado la semana pasada, cuando el Gobierno reveló que las reservas de petróleo había subido la semana anterior en 1.7 millones de barriles hasta alcanzar los 521.1 millones de barriles.
Por su parte, los contratos de gasolina con vencimiento en septiembre subieron 1 centavo y terminaron en 1.31 dólares el galón, y los de gas natural para entrega en ese mismo mes bajaron 4 centavos hasta 2.73 dólares por cada mil pies cúbicos.
Mientras, Wall Street cerró también con pérdidas y el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, bajó un 0.49 % y encadenó su séptimo día consecutivo de números rojos por primera vez desde hace un año.
Ese índice bajó 90.74 puntos y terminó 18,313.77 unidades, el selectivo S&P 500 perdió un 0.64% hasta los 2,157.03 enteros y el índice compuesto del mercado Nasdaq cayó un 0.90% hasta las 5,137.73 unidades.
Desde los primeros compases de la jornada los operadores en el parqué neoyorquino apostaron por las ventas en una sesión que estuvo marcada por una nueva tanda de resultados empresariales dispares y otra caída del precio del petróleo en los mercados internacionales.
En cuanto a la temporada de resultados, la farmacéutica Pfizer no convenció a los mercados y sus acciones cayeron un 2.47% en la Bolsa de Nueva York (NYSE), mientras que la multinacional Procter & Gamble sorprendió positivamente y sus títulos subieron un 0.41%.
En segundo plano quedó la publicación por parte del Departamento de Comercio de Estados Unidos de un dato económico en línea con lo que habían previsto los analistas sobre el gasto personal de los consumidores, que creció en junio un 0.4%.
Casi todos los sectores en Wall Street cerraron la sesión en números rojos, como el financiero (-0.94%), el tecnológico (-0.94%), el industrial (-0.77%), el sanitario (-0.38%) o el de materias primas (-0.24%) mientras que el energético subió un 0.46%.