Emprender no es un proceso sencillo. Sin embargo, trabajar en un proyecto que te apasione, puede ser clave para que sea exitoso.
Así lo ha demostrado Ileanne Bello, mejor conocida como “Lily”, una joven mercadóloga que ha echado raíces en el sector de la belleza a través de su Flawless Glam Place, un espacio donde se promueve la “belleza integral”.
Desde niña siempre demostró su pasión. Recuerda que le decía a su madre que sería “salonera” (estilista), sueño que hizo realidad. “Desde que tuve uso de razón me gustó. Aunque por muchos años me dediqué a mi carrera. Al final terminé dentro de lo que me gusta”, afirma.
De acuerdo con Bello, la peluquería está subestimada en República Dominicana. “Es una carrera netamente artística. O sea, las peluqueras son artistas y creo que ese tipo de trabajo está subvalorado en el país”.
Su negocio, que hoy cuenta con 35 colaboradoras, inició como un estudio y tienda de maquillaje, que, gracias a la aceptación del público, fue ampliando hasta convertirse en un centro integral, donde sus clientas pueden salir renovadas.
Resalta que se siente orgullosa de poder ayudar a que sus colaboradoras crezcan en el sector. “Muchas de ellas entraron a pie y ya se compraron su carro. Eso me hace sentir muy bien y siento que estoy contribuyendo con familias, con mujeres que tienen un talento que quizá en algún sitio no lo valoraron. Eso me hace sentir muy bien”.
Inicios
Bello trabajó por un tiempo en la industria farmacéutica como visitadora a médicos. Mientras ejercía su profesión, se formó como maquillista profesional. Además, ha realizado estudios de tricología, colorimetría, entre otros relacionados con el sector. Su trayecto como emprendedora lo inició con una tienda de accesorios que no resultó ser tan exitosa como esperaba. “No me fue muy bien. No siempre tiene que irle bien a uno en el primer emprendimiento”.
Sin embargo, este “fracaso” solo representó una oportunidad para poder incursionar en el mundo del maquillaje en 2015. “En su momento, fue un boom, porque había pocos estudios de maquillaje, que es algo integral, donde tú puedas maquillarte, aprender a maquillarte y que te vendan el maquillaje”.
Su negocio, que en la actualidad está ubicado en Naco, empezó en un cuarto de un apartamento. “Después pasé a un local pequeño de 75 metros y luego pasé a otro más grande. Ahora estamos en uno que tiene casi 400 metros. En cinco años, he brincado mucho”.
A parte del Flawless Glam Place, Bello ha desarrollado una línea capilar, la cual tiene en plan ampliar en los próximos años.
Dentro de sus planes a futuro, está replicar su negocio en varios puntos del país. “Quiero bajo una misma dirección tener varias sucursales de Flawless”.
Retos
Señala que es necesario que se impulsen más políticas públicas que apoyen al desarrollo de emprendimientos en el sector belleza.
Bello, quien es propietaria de una tienda de cosméticos, argumenta que existen muchas limitaciones regulatorias al momento de importar. “Para una persona que está emprendiendo de cero es muy difícil, porque una cosa son los impuestos y otra cosa son los permisos”.
Sobre la carga tributaria, precisa que “no puede ser que un empresario millonario pague el mismo porcentaje de impuestos que una persona que esté emprendiendo. No lo veo justo”.
Al referirse al sector bancario, asegura que se necesitan programas que apoyen a las emprendedoras, ya que no siempre tendrán el historial crediticio para calificar para un préstamo.
Recomendaciones
Bello, que se describe como una mujer luchadora y creativa, recomienda a las emprendedoras pensar en proyectos innovadores que les permitan destacarse.
La creadora de los productos Flawless afirma que “la visión, el trabajo y la constancia son lo más importante para desarrollar cualquier emprendimiento”. Además, invitó a que sean creativas y se mantengan en constante capacitación para ofrecer un buen servicio.
Recuerda que es importante realizar un estudio de mercado antes de lanzar la iniciativa, ya que esto le permitirá ajustar los servicios.
“Empieza pequeño”, exhorta. Bello indica que las emprendedoras deben iniciar sus proyectos con los recursos que tengan disponibles y no endeudarse. “Construye una zapata para que sea fuerte y vaya creciendo fuerte”.
“Algunas veces también hay emprendedores que hacen cosas que no deben. Por ejemplo, alquilar un local grandísimo, carísimo, sin tener clientes. Empieza pequeñito y ve creciendo poco a poco”, afirma.