La Fundación Reef-World, coordinador internacional de la iniciativa “Aletas Verdes”, del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, y Reef Check República Dominicana se han adaptado a la nueva realidad causada por la pandemia para poder alcanzar a más operadores de buceo con su mensaje de conservación.
La pandemia provocada por el covid-19 ha causado un serio trastorno mundial en la industria turística y han surgido inquietudes medioambientales, por ejemplo, el incremento en el uso de plásticos de un solo uso tales como guantes y mascarillas.
Sin embargo, para la iniciativa “Aletas Verdes” en la República Dominicana, la pandemia también ha traído algunos efectos positivos para la conservación, como lo es una mejoría en la calidad del agua costera debido a la reducción drástica de las actividades humanas.
Al principio del brote, en marzo 2020, las actividades turísticas se detuvieron bruscamente, lo que provocó que todas las actividades y evaluaciones de Aletas Verdes se suspendieran. Sin embargo, en la República Dominicana hubo un auge de interés por parte de los centros de buceo de integrarse al programa Aletas Verdes. Hay planes en desarrollo para llevar a cabo entrenamientos y evaluaciones de estos negocios una vez estén en pleno funcionamiento nuevamente.
Los centros turísticos han estado operando aproximadamente a 30% de su capacidad desde julio; no obstante, el plan es que muchos de los hoteles y centros turísticos abrirán al público durante la temporada alta en noviembre 2020, y entonces las evaluaciones de Aletas Verdes podrán reanudarse nuevamente a finales de año. El haber cambiado las jornadas de sensibilización medioambiental del programa de presenciales a virtuales ha ayudado notablemente a aumentar el número de personas quienes son alcanzadas por dichas jornadas: de decenas a cientos.