El turismo es, sin duda, la principal actividad generadora de divisas en nuestro país. República Dominicana tiene mucho que agradecer a este sector económico porque, además, es un dinamizador de otras actividades, tales como construcción, agricultura, industria, empleo, servicios, comercio, seguridad, electricidad o energía y educación.
Con esto quiero decir que si el turismo está en baja por vía de consecuencia habrá otros que lo estarán también. Aunque nuestra economía no depende sólo del turismo, ya que tenemos las zonas francas y las exportaciones de bienes y servicios, tanto agrícolas como de implementos médicos y otros, la actividad turística está en el subconsciente de los dominicanos.
Cuando le preguntamos a cualquier persona en la calle cuál actividad económica aporta más a la economía, probablemente más de la mitad dirá que es el turismo. Y lo hacen de manera automática, por decir de alguna manera. La respuesta sobre el turismo está a flor de labios.
Quizá (o sin quizá) sea un sector que se ha sabido mercadear efectivamente y todos los dominicanos entienden que sin turismo nuestro país no podría salir adelante. Quizá la gente pasa por alto que hay otras actividades tan importantes como el turismo.
¿Qué pasa con el turismo que ha posicionado tan bien en la psiquis de las personas? Por más de 50 años el país ha sabido venderse como un destino de vacaciones e inversiones turísticas. Hemos sido exitosos en este sector. El hecho de haber tenido una actividad que año tras año venía mostrando números en constante crecimiento, tanto en la generación de divisas, llegada de visitantes, vuelos y nuevos hoteles, entre otros aspectos, hacen del turismo un sector atractivo para todo.
República Dominicana, por donde entraron los europeos a este hemisferio, ciertamente tiene atributos y primicias que ningún otro país de la región puede mostrar. Esto es, en sí, una razón más que poderosa para que seamos un referente turístico e histórico en América. En cierto modo lo hemos aprovechado, pero no en todo su potencial.
No es un secreto que nuestra Ciudad Colonial, donde se han hecho importantes trabajos de remozamiento en los últimos años, y los ríos Ozama e Isabela, que atraviesan Santo Domingo merecen atención.
Un sondeo realizado por el periódico elDinero entre sus lectores arrojó que cerca del 47% de los dominicanos considera que el turismo es el que más aportes hace a la economía. Creo que sí, que cuando se suman todas las demás actividades que se mueven atadas a este sector, el país tiene en el turismo a su principal motor.
¿Cuál es el problema, entonces? Su altísima dependencia de las condiciones del mercado internacional. El covid-19 ha demostrado que debemos poner algunos huevos en otras canastas.
La psiquis de los dominicanos, especialmente de quienes tienen el poder de tomar decisiones, no sólo deben tomar en cuenta lo importante que es el turismo, sino su vulnerabilidad ante choques externos. ¿Qué podemos hacer, entonces, para fortalecer otros sectores?