El grupo tecnológico chino Lenovo, mayor fabricante mundial de ordenadores personales, logró un beneficio neto atribuido de US$213 millones (€180 millones) entre abril y junio, primer trimestre de su año fiscal, lo que representa una mejora del 31.5% respecto del resultado de la compañía en el mismo periodo del ejercicio anterior, pese a la incertidumbre por la pandemia de covid-19.
La facturación de Lenovo en el trimestre alcanzó los US$13,348 millones (€11,282 millones), un 6.7% más que un año antes, mientras que el resultado operativo del fabricante chino aumentó un 27%, hasta US$436 millones (€368 millones).
En concreto, la unidad de ordenadores personales de Lenovo elevó un 10% sus ingresos, hasta US$10,603 millones (€8,962 millones), mientras que el negocio de móviles registró una caída del 27.3% de la facturación, hasta US$1,093 millones (€924 millones). De su lado, el área de datos aumentó un 18.9% sus ingresos, hasta US$1,612 millones (€1,362 millones).
“Lenovo ha recuperado rápidamente la inercia tras el impacto de la pandemia y ahora estamos aprovechado las nuevas oportunidades que han surgido por el trabajo remoto, la educación a distancia y la aceleración de la digitalización”, explicó Yang Yuanqing, consejero delegado y presidente de Lenovo.