“El mejor medicamento para una epidemia de esta naturaleza es el distanciamiento social” y no existe nada por encima de esa medida para el control de la transmisión del nuevo coronavirus en el país.
En estos términos se refirió el ministro de Salud Pública, Rafael Sánchez Cárdenas, cuando se le preguntó sobre posibles levantamientos de medidas de confinamiento social y las violaciones de algunos ciudadanos al toque de queda dispuesto por el Gobierno desde mediados de marzo.
Sánchez Cárdenas indicó que “si pretendemos continuar con este proceso de descenso de la mortalidad y de los internamientos como los estamos observando”, entonces deben mantenerse las medidas de prevención, confinamiento social e higiene que se han estado manejando y que organismos internacionales, como la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de Salud (OMS), han recomendado.
Explicó que las medidas tienen que mantenerse en tanto se puedan ir abriendo simultáneamente los negocios comerciales que impulsan el dinamismo económico del país.
Dijo que hay que esperar un estudio que el Gobierno va hacer para el reinicio de actividades que puedan progresivamente ponerse en funcionamiento, pero con las medidas protocolares para evitar que el virus se siga propagando.
El ministro expresó preocupación ante este tema que se ha convertido en un componente “sumamente importante” para hacerle frente a la propagación del covid-19.
Reitero que las medidas continúan siendo las mismas: el lavado constante de las manos, el uso de mascarillas en áreas públicas y el evitar salir a las calles, a menos que sea una urgencia, como las compras caseras, de medicamentos y los trabajadores que estrictamente deben cumplir un horario.
El 17 de mayo finaliza el estado de emergencia nacional, luego de que el presidente, Danilo Medina, solicitara la extensión del mismo al poder legislativo.