[dropcap]D[/dropcap]urante los últimos 25 años, el gasto público dominicano ha experimentado un notable crecimiento y ha incrementado su participación en el producto interno bruto (PIB).
Más recientemente, durante los últimos 15 años, el comportamiento del gasto público refleja una política fiscal que, enfocada en el corto plazo, prioriza su crecimiento por encima de los ingresos fiscales.
Como consecuencia, en los últimos 15 años se han registrado déficits fiscales todos los años, con excepción de 2007.
El gasto del Gobierno Central se ha incrementado el doble de rápido (2.4 veces) que la economía dominicana, medida por el producto interno bruto (PIB) real.
Entre 1991 y 2015, el PIB real creció 3.5 veces su monto, sin embargo, el gasto real del gobierno lo hizo en 8.5 veces. Como consecuencia de su crecimiento, el gasto público duplicó su participación en el PIB de República Dominicana: de un 7.3% del PIB en 1991 a 17.4% en 2015.
Desde 1990, los ingresos y gastos públicos, expresado en dólares corrientes, experimentan un significativo crecimiento; se multiplicaron por 11.9 los ingresos y por 15.5 los gastos al año 2015. Sin embargo, debido a que los gastos crecen por encima de los ingresos, el Gobierno Central registra déficits fiscales durante los últimos 15 años (2000-2015), con excepción de un superávit en 2007.
Para el presente año se prevé que continuará la misma tendencia, la cual también prevalecerá en 2017, según el proyecto de presupuesto del próximo año presentado en el Congreso Nacional.
Según la clasificación económica del gasto público, éste puede clasificarse en dos grupos: gastos corrientes, que se utilizan para cubrir las operaciones del gobierno; y, gastos de capital, que comprenden las inversiones de éste.
Mientras el gasto de capital se incrementa 6.6 veces desde 1990, el gasto corriente lo hizo 23 veces. Es decir, que cada año se hace más costoso el mantenimiento del Gobierno Central y que lo gastado en bienes de capital e infraestructuras es menor en términos relativos.
El gasto en remuneraciones y contribuciones a empleados representa cerca del 29% del gasto total del Gobierno Central y el 35% de su gasto corriente. Las remuneraciones crecen 17.6 veces respecto a 1990.
El gasto en el pago de intereses, cuyo crecimiento es consecuencia de las deudas asumidas para financiar los déficits fiscales, se ha incrementado 54.9 veces respecto a 1990.
Las transferencias del Gobierno Central también representan un alto porcentaje del gasto total. Se han incrementado 27.3 veces respecto a 1990, principalmente, por los subsidio otorgados por el Gobierno Central al sector eléctrico nacional, especialmente al sub-sector de distribución eléctrica.
Durante 2015, las remuneraciones y contribuciones a empleados, el pago de intereses de la deuda y las transferencias corrientes representaron el 88.5% del gasto corriente del Gobierno Central y el 71.2% de su gasto total.
El gasto del Gobierno Central evidencia una rápida senda de crecimiento, en especial el gasto corriente. A pesar de que los ingresos también se incrementan a un buen ritmo, la política fiscal que ha imperado ha dado como resultado 14 balances fiscales deficitarios entre 2000 y 2015.
Estos déficits han generado un aumento en la deuda pública y, en consecuencia, en el gasto en pago de intereses. Para este 2016, según estimaciones propias, se prevé un déficit fiscal casi el doble de lo presupuestado; para el 2017, el presupuesto formulado para ese año también mantiene la tendencia deficitaria que incrementa el endeudamiento público.
En consecuencia, desde CREES consideramos necesaria la implementación de una reforma fiscal integral que comprenda una Ley de Responsabilidad y Transparencia Fiscal, y una reforma integral al Código Tributario para corregir distintos entuertos en el área fiscal.
Estas políticas públicas son necesarias para garantizar la sostenibilidad fiscal a largo plazo y facilitar que el país mantenga un desarrollo económico sostenible. De igual manera, es necesario realizar una reforma del Estado que reduzca duplicidades e ineficiencias en el gasto público.