[dropcap]L[/dropcap]a firma estadounidense Standard & Poor’s ha mejorado la calificación de largo plazo a República Dominicana. Es una excelente noticia y da fe de que las autoridades lo están haciendo bien, que están cumpliendo su palabra de manejarse con disciplina fiscal.
Standard & Poor’s, una división de McGraw Hill Financial, con sede en Nueva York, analizó una serie de indicadores relacionados con el desempeño financiero y económico del país, entre los que están la capacidad de pago de la deuda emitida, obligaciones a mediano y largo plazo, el déficit del Gobierno, ingresos y el crecimiento del PIB real, entre otros aspectos, para llegar a la conclusión de mover de B+ a BB- nuestra calificación en el mercado de capitales.
De todos modos representa un avance para el país y un apoyo a la gestión del presidente Danilo Medina, que ha dado muestras de ser cauto en el manejo público. Nuestra calificación, como país, no se movía desde 2011, lo cual habla muy bien de las posibilidades que tenemos ahora de acudir al mercado de capitales en caso de necesitarlo. Ojalá que no, pero las condiciones están dadas, incluso, para lograr mejores tasas de interés.
Es bueno resaltar que Standard & Poor’s ha valorado el resultado de mejoras tanto en las cuentas fiscales como en el desempeño de la economía. Obviamente, la agencia destaca la disciplina del Gobierno a partir de 2012, año en que se inició la presente gestión. Valora también el incremento en el gasto social, así como el mejor manejo de caja y de la deuda pública.
La calificadora consideró muy favorable la reciente implementación de la Cuenta Única del Tesoro, la cual centraliza las cuentas del Gobierno y favorece el manejo del flujo de caja y a un control más eficiente del gasto, así como la flexibilidad que otorga la Ley de Financiamiento de 2015, que permite una mejor gestión de la deuda pública.
Un hecho que consideró muy positivo fue la operación de recompra de la deuda de Petrocaribe, que resultó en una disminución de la deuda pública, extensión del plazo promedio de la deuda y reducción en los flujos futuros de pago. Sin duda, estas son buenas noticias.
Esta mejoría en la calificación del riesgo-país está acorde con la disminución del riesgo de República Dominicana desde el punto de vista de los inversionistas internacionales, lo cual redundará en mejores tasas de interés exigidas en la colocación de los nuevos bonos externos.
No tenemos duda de que la actual gestión seguirá actuando con prudencia en el manejo de las finanzas públicas y las mejores calificaciones están por venir.
También sabemos que Standard & Poor’s, que como todo en la vida no es perfecta, tiene mucha razón en dar su opinión favorable sobre la economía dominicana. Estas buenas nuevas no sólo llenan de optimismo al país, sino que muestran a los tenedores de nuestros bonos que su inversión está segura, que hay capacidad de pago y con unas perspectivas estables.